03 de diciembre de 2020

Comisiones Regionales de Competitividad e Innovación, protagonistas de la reactivación económica empresarial


El Gobierno determinó como hoja de ruta promover la competitividad en las regiones.
Pie de foto: Cuando el Gobierno estableció la Agenda Nacional de Competitividad e Innovación, determinó como hoja de ruta promover la competitividad en las regiones.

Fijan los derroteros de las Comisiones Regionales de Competitividad e Innovación, en el marco de la recuperación  económica del país. 

Se priorizan 64 proyectos contemplados en las 32 agendas departamentales de competitividad e innovación.

Las Comisiones Regionales de Competitividad e Innovación (CRCI) son las grandes protagonistas del desarrollo empresarial y productivo en Colombia”. Así lo manifestó el ministro de Comercio, Industria y Turismo, José Manuel Restrepo, en la instalación del encuentro anual de Comisiones Regionales, que tiene lugar entre hoy y mañana.

De acuerdo con el jefe de la cartera de Comercio, Industria y Turismo, cuando el Gobierno nacional estableció la Agenda Nacional de Competitividad e Innovación, determinó como hoja de ruta promover la competitividad en las regiones.

Es este sentido, agregó que se fijó como uno de los grandes desafíos, la promoción del desarrollo empresarial con énfasis en los territorios y que la manera de lograr avances en ese sentido era de la mano con las CRCI. 

Es así como entre el Gobierno, sector privado y entidades territoriales se ha adelantado un trabajo articulado que ha permitido la construcción de Agendas Departamentales de Competitividad e Innovación, en las que se han priorizado proyectos, programas e inicativas de cáracter empresarial de cara a la recuperación.

Al respecto, la Consejera Vicepresidencial, Marcela Urueña, anunció que en el marco de las Giras Únificadas Regionales, se dio prioridad a 64 proyectos de las 32 Agendas Departamentales de Competitividad e Innovación que le apuestan a sectores estratégicos priorizados,  claves en el proceso de reactivación económica, dentro de los que se destacan: turismo, agricultura y ciencia, tecnología e innovación, entre otros.

Según la Consejera, se trata de procesos que le apuestan a la repotenciación de la competitividad en las regiones y que están en sintonía con las recomendaciones hechas por la misión de sabios, en torno a la necesidad de fortalecer la innovación, precisamente desde los territorios.

Frente al tema, hizo un llamado a que las comisiones trabajen en la orientación de sus esfuerzos institucionales y se articulen como una instancia que permita la repotenciación de los territorios, apalancada en el potencial de renglones como el agropecuario, infraestructura y bioeconomía.

“Estamos convencidos de que las comisiones son el espacio idóneo para el diálogo entre sector público y privado y para llevar innovación y competitividad a las regiones, así como para construir relaciones beneficiosas, con el fin de generar conocimiento al servicio del aparato productivo”, precisó.

No obstante, precisó que se requiere de mucha voluntad y de un trabajo conjunto y articulado, con el objetivo de “sacar adelante” las 32 Agendas Departamentales de Competitividad e Innovación.

Por su parte, Julián Domínguez, presidente de Confecámaras, resaltó el trabajo que se ha realizado desde las Secretarías Técnicas de las comisones apoyadas desde las cámaras de comercio para impulsar la competitividad en las regiones, porque es en el marco de las comisiones donde  se construye el empleo y el desarrollo productivo en los departamentos.

Destacó, además, el trabajo articulado y las alianzas interinstitucionales, que han permitido importantes logros en distintas regiones. Se destacan los casos de Magdalena, Putumayo y Caldas.
 

Los retos


Según Domínguez, es necesario avanzar en los siguientes desafíos: centrar la conversación con las regiones sobre las Agendas Departamentales de Competitividad e Innovación, como instrumento articulador de la acción estatal; identificar fuentes de financiación para los proyectos priorizados en las agendas y desarrollar o ajustar instrumentos para facilitar su ejecución.

Así mismo, establecer alianzas regionales e instrumentos gubernamentales tendientes a avanzar en la formulación de los proyectos actualmente en fase de ideación y subregionalizar la Agenda de Reactivación Económica.